No puedo escribir. Me siento triste. Y me da risa mientras
escribo. Tengo un EGO en triple mayúsculas. No sé qué es lo que siento. Intento
centrarme en el teclado buscando escucharme. Por qué ahora no puedo conectarme
conmigo. Con él Espíritu Santo si prefieres. Quién? Con quien hablo? Quién es
el que habla? A veces no sé nada como hoy. Con quien conecto al escribir? Es mi
mente condicionada o Yo?...Estoy en plena ¿noche oscura del alma? Qué bien! Sé
que está bien y de alguna manera cuando escribo para desenmascarar a mi mente y
su emoción, siento Paz. Pero a veces esa supuesta Paz, no es más que el Ego
nuevamente colocándome a mi misma como especial...Jo! como diría una amiga
catalana. Pero sigamos. Lo que busco es huir de la “tristeza”. Como es ese
sentimiento? Corporalmente siempre siento la tristeza en mis ojos. Pero también
una presión o peso en el pecho. Como ganas de llorar contenidas. Mentalmente
pues los pensamientos me dicen ¿Qué hago aquí? ¿No eres nadie? Mientras que
todo el mundo está ocupado y haciendo cosas. ¿Tú no haces nada? Y a la vez hay
pensamientos que contestan a esas preguntas: No sé qué hacer. Mira la edad que
tengo y todavía ando en estas mariqueras. Me siento triste porque estoy aburrida,
no quiero estar aquí. Y otro pensamiento dice: Ya no recuerdo… ah! le
encantaría soñar con lo que le gustaría hacer o estar haciendo. Pero otra voz
en mi cabeza dice no sueñes que no se te va a dar y vas a sufrir. Joder! Dice la
que creo que es la que escribe, que tormento de pensamientos...y me sonrío
intentando sentir. Qué es lo que me preocupa? A la final que carajo es lo que
me pasa?...Es un tema, un solo tema. Si eso estuviera sucediendo me sentiría feliz.
Por qué no puedo aceptar Hoy este momento. Cuál es el problema de este momento?
Nada. Solo que me gustaría estar haciendo algo que me guste o estar con ese
Tema. No creo en Mí, me dice un
pensamiento. Estoy bien metida creo que no estoy ni a la mitad de la Noche….Por
qué? No logro sacar de mi ese pensamiento: “no tengo ganas de hacer Nada”.
No es el mismo Estado, pero lo recuerdo y de alguna manera
acepto. Pero la diferencia es que en aquel Estado no había miedo. Aquí en este
momento tengo Miedo. Porque todo lo pienso antes de actuar, antes de hacer. En
ello radica el problema del Ego quizás pueda llamarlo asi. El miedo ocurre
cuando pensamos.
Ahora lo siento más claro. He perdido mi conexión con el
Ser. Si gran descubrimiento jajaja…pero
en “términos concretos”, como diría la intelectual, es como si no confiara en
lo que siento…algo así como que Siento, luego Pienso y luego Culpa! Es algo
así. A estas alturas ya me siento lejos de esta escritura. Todo pasa. Y no pasa
nada. Se trata de vivir Vivir VIVIR sintiendo, aceptando, no más. Como el libro
de Ayya Khema “Siendo Nadie Yendo a Ninguna Parte”.
Arte: Albena Vatcheva Tomada de: https://www.facebook.com/mujercirculando
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